El odio ha causado muchos problemas en el mundo, pero no ha ayudado a solucionar ninguno.

 

¿Por qué a las personas no les gustan los changos?

Los monos tienen una compatibilidad  en el ADN del  99% con nosotros, ninguna variedad de monos me parecen agradables. Explico mis razones:

1. Conductas violentas
2. Sucios
3. Perezosos
4. Transmiten enfermedades
5. Dicen que son listos, no lo suficiente para ganarse la atención del público.
6. Viven inmiscuyéndose en la vida de los otros de los habitantes de  ecosistema.

 

Ellos no han evolucionado cognitivamente a nuestro nivel y sus comportamientos son asociados a conductas biológicas de instintivas. No obstante, nuestras emociones (positivas y negativas), pensamientos y acciones si están relacionados con la historia familiar propia, las experiencias de vida y los gustos personales. Es decir, tenemos la capacidad de discernir las consecuencias de nuestros actos a diferencia de los desagradables changos. Incluso podemos crear emociones complejas únicas entre todas las especies de la Tierra como el odio.

El contexto social en el que nos desarrollamos determina nuestra conducta social. Actualmente vivimos en una sociedad deteriorada en valores y sentido común, somos reactivos ante situaciones que nos desagrada, poca insensibilidad al dolor de los otros,  priorizamos el “yo” sobre los otros. Es decir, seguimos las reglas morales cuando nos conviene de forma individual, en caso contrario no lo hacemos (motivaciones morales deterioradas).

El comportamiento humano se construye por la motivación (sentimientos) detrás de las acciones impulsadas por una necesidad (ayudar a otros, obtener reconocimiento social, defender ideales a nuestra persona física, etcétera). Cuando sentimos odio hacia otros en nuestro cerebro se activan áreas asociadas a la agresividad y predicción de movimientos en los otros y se desactivan otras relacionados al juicio y razonamiento generando en las personas una planeación de actos heroicos o malvados.

 

Cuando nuestro odio es violento, nos hunde incluso por debajo de aquellos a quienes odiamos.

 

¿Cómo se genera un monstruo capaz de instigar daño a otros: terrorismo, masacres y  genocidios? Diversas investigaciones han asociado diversos factores cuando somos sometidos a conductas violentas y/o abandono en la infancia; predisposición genética de trastornos mentales;  modificaciones neuroendocrinas, neuroanatómicos y neuroquímicos; mutaciones genéticas; etcétera.

¿Cómo podemos erradicar el deterioro moral, ético y social actual? Aquella que genera una perspectiva de bien común (empatía): podemos sentir dolor ante las desgracias de nuestros seres queridos y también ignorar el sufrimiento de desconocidos. Racionalizar las causas del odio hacia los otros: lo que odiamos del otro puede surgir de un reflejo de nuestro mundo interior. Y re educar con valores. Para contrarrestar el odio debemos preservar la empatía hacia los otros.

 

Con tropecientos polvitos de fe,

O.M

–

Créditos de la imagen a

Advertencia. Mis consejos/ vivencias no pretenden reemplazar la terapia con un profesional de la salud certificado. En esta liga puedes verificar la validez de la cédula profesional de su especialista:

https://www.cedulaprofesional.sep.gob.mx/cedula/presidencia/indexAvanzada.action

Es válido estar en desacuerdo con el contenido. Te invito a consultar fuentes diferentes de información y crear tu propio criterio respecto a los temas abordados en el blog.